No soy muy amiga de escribir, de hecho soy de las personas que prefiero tener notas cerebrales pero nunca he intentado plasmarlas en "papel", bueno sí, en realidad quise plasmarlas en este blog por allá en el 2011 (vaya intento fallido) cuando nació mi primer pequeñín, pero la situación actual con la educación de mis criaturitas me ha puesto a reflexionar y creo que es importante documentar su proceso formativo y los avances que tendrán al complementarlos con un algún método de educación alternativa.
Tengo dos hermosas criaturitas: Alejandro de 4 años quien se hace llamar Alo y Nicolás de 2 años y medio y que cariñosamente le decimos Nico. Mis hijos son tan parecidos pero al vez tan diferentes. Alo es un niño muy dulce y cariñoso, caritativo y generoso, le encaja dibujar, colorear, moldear con plastilina, disfrazarse, cocinar, actuar entre otras actividades. Nico es más seco y analítico y aunque también es muy cariñoso es menos sensible que Alejandro. Sus inclinaciones son más hacia los números y su memoria es de admirar, ha aprendido el abecedario y números en inglés sólo mirando vídeos en youtube. Le encanta "leer", cantar y como su hermano le encanta cocinar y jugar con la platilina. El mundo de mis hijos gira al rededor de lo que ven,de lo que juegan y de lo que aprenden.
Es por eso que he decido llevar una bitácora de actividades que reflejen su desarrollo físico e intelectual de manera personal e informal.
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